Nuestra Señora de París
En el París del siglo xv, con sus sombrías callejuelas pobladas por desheredados de la fortuna y espíritus atormentados, la gitana Esmeralda, que predice el porvenir y atrae fatalmente a los hombres, es acusada injustamente de la muerte de su amado y condenada al patíbulo. Agradecido por el apoyo que en otro tiempo recibió de ella, Quasimodo, campanero de Nuestra Señora, de fuerza hercúlea y cuya horrible fealdad esconde un corazón sensible, la salva y le da asilo en la catedral