Los trenes nunca vuelven
Luego de una discusión entre sus padres, Abel debe mudarse con sus abuelos. Este cambio viene acompañado de una nueva secundaria y una amiga muy especial llamada Adriana Luz. Y aunque Abel extraña las aventuras de su hogar anterior, el amor de sus abuelos, la complicidad con Adriana Luz y su vocación por la música le ayudarán a emprender el camino hacia la construcción de su propia felicidad.