El dialecto de la vida
Lo que comienza siendo una novela de viajes, con la persecución periodística de las huellas de Robert Louis Stevenson, se engarza con las reflexiones sobre el fracaso de la relación amorosa del protagonista con su mujer, y con la naciente y equívoca amistad entre el hombre maduro y el joven fotógrafo que le acompaña. El escenario es Escocia, pero no la Escocia turística de los catálogos, sino la neblinosa, la de los pantanos, los castillos derruidos en lugares casi inalcanzables, los viejos bebedores de whisky que soportan un último trago acodados en la barra. Alan, el maduro...